Recorre
caminos precarios
usados
por cabras grises de monte,
a
veces se traslada a parajes silvestres,
como
el vuelo de mariposas en recreo…
en
el enigma del día a día
y
el resplandor nacido de tardes silentes.
Va
el corazón encadenado al pensamiento
sobre
la huella de la sangre de lejanos humanos,
camina
lento diestro de madre,
hereje
de padre por tener ya tantos…
La
suplica viene del universo
que
intenta intentar lo intentado,
que
huye en momentos del grito vago
mientras
huele a azufre quemado.
Se
unen los manantiales de letras,
acordes
discontinuos de pasiones
que
cortan en segundos la cadena,
sangra
la mente y el corazón se hace llaga.
El
rito comienza en la perseverancia descalza
llena
de anhelo y energía,
plexo
de ardua cobardía vencida.
Hemos
de socavar nuevamente el túnel,
dejar
fluir la savia primaveral que llega
cuando
las argollas frías se hacen carne,
piel
recolectada de susurros en oídos,
de
hembras vivas, palpitantes
y
danzantes.
Que potente mujer!!!
ResponderEliminar(Mi mente que busca siempre estar entendiendo todo, se declara k.o., habiendo aprehendido que la poesìa te inunda sabia y a veces placenteramente).
Muchas gracias Santorini, me quedo placenteramente agradecida.
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